Os encontráis delante de un edificio de factura rústica que podemos datar del siglo XII gracias a la decoración de la puerta situada a mediodía. Está hecha con mármol de Isòvol y el arco de medio punto presenta una moldura cóncava en la que encontramos la decoración. Ésta está conformada por cabezas de hombre, algunos de ellos barbudos, y bolas. Cabe destacar que la madera de la puerta conserva parte del herraje antiguo.

La cabecera y el campanario son posteriores. Éste, situado también a mediodía, es de pequeñas dimensiones ofreciendo un aspecto rústico al conjunto.

En el Museo Nacional de Arte de Catalunya se conserva el frontal de altar de madera policromada del siglo XIII, donde se representaba el Pantocrator rodeado por los cuatro evangelistas.